Que rara me siento no estando enamorada

Cuando la vía espiritual tomó más fuerza en mi Vida, entendí que todo está predispuesto para Aprender a Amarme Incondicionalmente. Por eso, pensé bastante antes de sentarme a escribir sobre este tema.

Una pregunta recurrente aparece entre mis pensamientos y es la de: No es raro no sentirme enamorada?

Debo confesar que mucha es la teoría que tengo respecto de los vínculos y la forma en la que tenemos de manifestar nuestro Sentir frente a otras personas. Libros, blogs, facebook, meditar, dibujar, cualquiera sea el medio, las respuestas llegan.

Pero muchas veces, también me doy cuenta del poder que le doy al Ego, que transforma mi teoría de forma que voy retrasando mi avance, o al menos, poniendo mis propias piedras en el camino.

De todas las maneras posibles trato de evadirla, no darle lugar o no ahondar mucho en esta cuestión.

Y para seguir siendo completamente franca, hace varios años - unos diez al menos- tuve una pareja que fue un antes y un después en mis relaciones. Marcó mi nueva forma de vincularme... O mejor dicho, de no hacerlo.

A pesar de haber tenido otras experiencias, incluso hasta la de haber tenido mi primera convivencia, tampoco bastó para poder sentir que mi Entrega era completa.

Por eso, es que desde hace algunos meses, me volví a decir de tratar fehacientemente de serme lo más sincera posible, aunque esa labor es diaria y muchas veces quiero seguir evadiendo mi Sentir.

Ya es inevitable, no puedo negarlo más: Qué es lo que realmente extraño de "estar enamorada"?

Tal vez, mi Ego necesite ponerle una cara, nombre y apellido, pero en el fondo sé que no es uno u otro... Que soy Yo.

Todo me lleva a la conclusión de que no es "ese Ser especial", sino que me extraño a mi misma sintiéndome de esa manera.

Y que el miedo que siento a no vincularme, no es miedo al otro... Es el temor que siento de encontrarme en ese estado de Entrega, otra vez.  De saber esperar, no a un príncipe... ni a un sapo... Sino al Ser con el cual vibremos en la misma frecuencia de Amor. Para que ese Amor, no sólo nos permita compartir, sino además, nos permita seguir siendo libres.

Y, ahora sé que eso es lo que quiero para mí.

Mujer es Paz